¿Fotografía o cuento de hadas?
En el mundo de la fotografía y del arte es común encontrarte con grandes artistas capaces de crear imágenes completamente surrealistas, que te quitan el aliento con solo mirarlas. Muchas de estas son fruto de tratamientos y post procesado digital, en las que se incluyen animales o se hace a la persona volar a través de múltiples tomas. Aunque debo reconocer que tiene muchísimo mérito realizar este trabajo ya sea por los conocimientos técnicos que se deben tener de Photoshop o por el trabajo de inspiración y creatividad a la hora de crear la imagen, me gustaría centrarme en este ámbito pero de la mano de una fotógrafa que no recurre al tratamiento digital para crear su escena, sino que la crea ella misma desde el principio. No hay truco, os lo aseguro.
Acostumbro a hablar de varios artistas pero en esta ocasión la gran protagonista será Katerina Plotnikova, ya que me enamoré de sus fotografías en el preciso instante en el que las vi y me gustaría transmitir ese flechazo que tuve.
Katerina Plotnikova, fotografías sin título
Sus imágenes nos muestran una escena que parece haber sido sacada de un cuento de hadas. Sus musas aparecen en compañía de animales como si de un mundo fantástico se tratara, y nos recuerdan un poco a la historia de Alice in Wonderland donde los sujetos aparecen inocentes en un bosque misterioso lleno de peligros.
Las protagonistas de este cuento fantástico muestran una compenetración casi tangible con los animales de la escena; se nos presenta una relación entre los humanos y la naturaleza de una forma sorprendente y delicada. Las modelos posan como si se encontraran en su hábitat natural, como si vivieran en una historia donde estos seres son parte de ella.
 Katerina Plotnikova, fotografía sin título |
 Katerina Plotnikova, making of |
Sus escenarios suelen ser bosques mágicos habitados por osos, erizos y otras criaturas majestuosas. La extraordinaria belleza de sus imágenes recae en la simplicidad de las mismas, donde el punto fuerte es la luz y la atmósfera que consigue transmitir con cada una de ellas. La autora consigue crear este ambiente tanto por el medio como por la actitud tranquila y relajada de las protagonistas. Además, la utilización de colores pasteles y poco saturados nos llevan a cuestionarnos si estamos realmente viendo una fotografía o lo que vemos es la representación de un sueño en una imagen, siendo éste un tema muy común dentro del mundo del arte.
Y, ¿os pensáis que solo lo hace con animales? Pues estáis muy equivocados. Esta artista se encarga de escenificar todas sus imágenes sin el uso de Photoshop. Esto lo consigue con la ayuda de diferentes grúas, cuerdas y estructuras de las que cuelga posteriormente a sus musas. En estos casos sus modelos han aparecido suspendidas de árboles, de sillas o incluso levitando, como si algún poder misterioso les impulsara a hacerlo.
 Katerina Plotnikova, making of |
 Katerina Plotnikova, fotografía sin título |
Una vez más el resultado es una imagen surrealista que tiene lugar en un bosque o en un ambiente natural, que representa la vida cotidiana de la protagonista de la escena. Sus imágenes te hacen mirarlas detenidamente y, si es posible, más de una vez. Al mirarlas no acabas de creer si lo que estás viendo es real o no, ya sea por su carácter surreal o por el tono mágico y misterioso que tiene cada una de ellas. Al principio las miras y piensas que es un truco, pero cuanto más detenimiento y atención prestas, más acabas creyendo que esa escena es real, que es posible que estas musas tengan una vida de cuento en algún lugar recóndito de un bosque. Es la delicadeza y la elegancia con las que esta fotógrafa trata cada una de sus piezas que hacen posible esta interacción del espectador cada vez que las observa.
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