The Atlas of Beauty y Michaela Noroc
Hoy no os traigo a un artista, sino un proyecto fotográfico en concreto al cual todavía le queda un largo camino por recorrer (esperemos).
The Atlas of Beauty, de Michaela Noroc, empezó hace tres años en Rumania, de donde proviene la fotógrafa. Pero vayamos por partes. Michaela, de 30 años de edad y nacida en Bucarest, conoció la fotografía a sus 17 años de edad, pero no fue hasta los 27 cuando decidió dejar su vida corriente atrás y lanzarse a la aventura. Cogió todos sus ahorros y esfuerzos para realizar uno de sus sueños: viajar y fotografiar. Y tres años más tarde todavía no ha dejado de recorrerse el mundo con su mochila a la espalda y su cámara en la mano.
Pero todo este tiempo viajando tuvo un motivo, un objetivo. ¿Cuál? Explorar la belleza de la gente que nos rodea y que a menudo pasa desapercibida. ¿Tarea fácil? No lo creo.
Así nació The Atlas of Beauty, una compilación de retratos de mujeres de diferentes países, culturas y etnias. Una serie de fotografías que pretenden mostrar tanto la belleza interior como exterior de todas las jóvenes de este mundo, para demostrarles de una vez cuán especiales son. ¿Y cómo nos lo transmite a nosotros? Con la mirada. La fotógrafa tiene el objetivo, entre otros, de capturar esa sensación de calidez y serenidad que proviene de los ojos de una mujer y que a veces equilibra la negatividad que vemos en los medios de comunicación.
Pero Michaela no es la única que casi ha dado la vuelta al mundo. Su proyecto llegó a ser el blog de Tumblr más viral en 2015, y ha aparecido en The Guardian, The Huffington Post, Forbes y BBC, entre muchos otros. Es más, ¡apareció en el programa Super Soul Sunday, de Oprah Winfrey!
Para la fotógrafa, la belleza no puede ser definida por una raza o color, y es por ello que quiso mostrar la gran diversidad del planeta con cara y ojos. Una bonita apología de la multiculturalidad de nuestra sociedad. The Atlas of Beauty ha llegado, de alguna manera, a ser un grito en contra de la discriminación y ha llevado a la aceptación de que no existe un único canon de belleza. Por otro lado, pretende que el proyecto sea un testimonio de nuestro siglo y que dentro de otros tantos años recordemos cómo éramos y mantengamos vivos nuestros orígenes.
¿Y qué hay detrás de todos esos retratos? Hay encuentros fortuitos con mujeres interesantes por la calle, con 30 segundos para tomar una buena fotografía. Hay búsquedas por redes sociales y encuentros al día siguiente. También hay largas conversaciones con las retratadas (todas las historias que hay detrás las podemos encontrar en su fanpage). Según afirma la fotógrafa en una entrevista que realizó para The Telegraph, cuando fotografía a una mujer tiene tendencia a hablar mucho, intentando así que se sienta especial, orgullosa y única. Una inspiración para que sean ellas mismas, naturales y auténticas.
¿Y por qué mujeres? En algunas entrevistas nos comenta que es porque así le es más fácil sentirse identificada, por ello también limitó el rango de edad al suyo. Imagino que también ha sido por ponerle un límite al proyecto. Quién sabe, quizás con el tiempo amplíe a rostros de todas las edades y sexos.
Y para despedirnos, como de costumbre, algunas palabras de la artista que nos acercan más tanto al proyecto como a ella: “trabajo duro por mi sueño y, por casualidad, este sueño es interesante para los medios de comunicación. Pero hay millones de mujeres en el mundo que trabajan incluso más duro por sus objetivos, y quizás sus acciones no parecen tan espectaculares desde el exterior”.
- 3 destinos para amantes de la fotografía - 29 julio, 2016
- Daniel Beltrá y la fragilidad de la Tierra - 18 julio, 2016
- Una fotógrafa para enamorarse: Karen Rosetzsky - 29 junio, 2016
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!