Lumangueba
Manuel Guerrero, conocido como Lumangueba en el terreno artístico, nació en Ciudad de México en 1994, lugar en el que continúa viviendo en la actualidad. Tras una prematura manifestación plástica que con posterioridad hizo su camino hacia el dibujo, Lumangueba sintió un profundo interés por la música y la literatura; interés que sigue vigente hoy en día. Más tarde accedió a estudiar Artes Visuales en la Facultad de Artes y Diseño en la Universidad Nacional Autónoma de México, estudios que sigue cursando y que está cerca de finalizar.
La obra de este joven artista se basa en la existencia, pero sin recurrir a su sentido más abstracto sino al más efectivo. En su aspecto formal y a través de un fuerte impacto visual, Lumangueba se basa en la metropolis y, por defecto, en sus avenidas, sus calles y en la manera en que todo en su interior se relaciona entre sí. El artista mexicano asegura que vivimos en un mundo en que las interconexiones son de una gran importancia tanto para entender el contexto humano como para analizarnos desde una perspectiva crítica, ya sea como individuos aislados o en sociedad.
La inspiración le llega de la mano del paseo continuo. Recorre las calles y atraviesa la ciudad, perdiéndose en el tejido urbano y viéndose a sí mismo ocupando espacios que no imaginaba ver, trazando de este modo una cartografía de su recorrido y de los lugares en los que “existió”. Y hacia ello se enfoca su labor artística, hacia la idea de la ciudad como un espacio en constante construcción y destrucción, al igual que un ser con vida propia que nunca se mantiene estático ni inmutable. El ser humano, al ser quien habita y construye tal espacio, no puede evitar verse reflejado en él. La manera en que el individuo vive la ciudad no suele tomarse en especial consideración, y el artista defiende la idea de que, lejos de las rutas de dirección y acceso impuestas, se nos presenta la posibilidad de configurar nuestras propias rutas.
A través de dibujos digitales que remiten a las cartografías, Lumangueba indaga en la importancia de espacio, ubicación, tránsito y dirección, planteando nuevas opciones de estructura y movimiento, dando lugar a una red de tejidos muy diversos.
Hablaremos de este proyecto, que sigue en marcha, y de otros del artista en el cuarto número de Atelier. Mientras tanto, y con el fin de conocer algo más acerca de él, echemos un vistazo a su espacio personal y redes sociales.
- Sandra De Jaume - 6 septiembre, 2017
- Rebeka Elizegi - 18 agosto, 2017
- Ana Beltrán Porcar - 6 julio, 2017
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