Hand lettering: vuelta a la vieja escuela

Como os comenté en mi post sobre fotografía subacuática, esta semana volvemos a tratar temas relacionados con el diseño pero esta vez os traigo algo nuevo con un toque personal. Si os habéis estado preguntando de qué podría ir y se os ha pasado por la cabeza que podría ser de hand lettering, ¡habéis dado en el clavo! Como ya sabréis, el diseño es una de mis pasiones, por lo que paso bastantes horas navegando por la red, siempre en busca de inspiración y de nuevos artistas para contemplar su obra. Es por este motivo que he decidido enseñaros algunos de los artistas que me cautivaron en su momento, por su talento y originalidad.

Si alguno de vosotros ha estado explorando, se habrá dado cuenta de que últimamente ha crecido de forma exponencial una nueva corriente en la que predomina un estilo más artesano y natural, con un toque humano. No hace falta darle muchas vueltas al asunto para encontrar la respuesta de por qué ha surgido este nuevo estilo. Formamos parte de una sociedad en la cual la tecnología es parte de nosotros, somos incapaces de una vida sin la intervención de ésta. Es por esto que se ha realizado una mirada al pasado para recuperar aquellos procesos más manuales, humanizando a los diseños dotándolos de un aspecto más amable, cálido y rústico.

Un artista cuya obra me gustaría destacar es Jorgen Grotdal, un jovencísimo diseñador noruego que con tan solo 17 años de edad, ha conseguido crear un portfolio de una extensión y calidad inimaginables. Sus obras están compuestas por tipografías realizadas a mano para posteriormente llevarlos al mundo digital, donde se puede observar cómo el autor exprime su creatividad aportando un toque único y personal. Diseños orgánicos, donde se deja de lado la perfección que nos aporta la tecnología para mostrar el concepto de una forma más directa. El uso de tipografías sans serif, con un toque ligeramente redondeado, nos da la sensación de algo cercano y más humano.

 

Jorgen Grotdal, proyecto Posters & Logos

Jorgen Grotdal, proyecto Stamps designs

Y la pregunta es: ¿Cómo conocí este mundo? Pues muy fácil: gracias a Ligature Collective, una plataforma que recoge el trabajo de diferentes artistas de todas las partes del mundo unidos por la pasión hacia el hand lettering y el diseño. A través de ella, puedes buscar inspiración y apreciar el trabajo de cada uno de los artistas que la forman como podría ser el caso de Nicolas Fredrickson, un diseñador de Nebraska que disfruta realizando bocetos en papel, dando vida a sus diseños a mano antes de realizarlos en ordenador.  Sus diseños llenos de vida huyen de las líneas rectas y perfectas, buscando un sentimiento más real, nostálgico y artesano.

 

Nicolas Fredrickson, proyecto Best of OmaType

Nicolas Fredrickson, proyecto Bespoke Letterpress

 

A través de la visualización de estos ejemplos, podemos llegar a la conclusión de que el mundo del hand lettering reúne una serie de características y semejanzas. Un recurso muy utilizado es emplear diferentes tipografías para dar más dinamismo a la composición y resaltar siempre una parte de ella. Tipografías sans serif son combinadas con tipografías serif, de igual manera que se combinan tipografías con líneas rectas y otras más orgánicas para dar un resultado más dinámico y ameno. Además, añadir ornamentaciones, texturas y alargar partes de determinadas letras puede ser una muy buena opción para dirigir la mirada del espectador, así como jugar con los diferentes tamaños de las tipografías para focalizar la atención en una parte concreta del mensaje.

Todos estos pequeños detalles dan lugar a una creación única, donde el autor expresa y exprime su creatividad de forma totalmente subjetiva, creando un diseño exclusivo y siguiendo un proceso manual.

 

Noel Shiveley y Alex McDonell, Lettering Set

Jennet Liaw, proyecto Lettering 2014

Jennet Liaw, proyecto Lettering 2014

 

Llegados a este punto, permitidme hacer una comparación. Paralelamente al mundo del diseño, considero que la fotografía también ha experimentado esta necesidad de buscar y mirar hacia el pasado, de destapar los orígenes y volver a utilizar lo que muchos de nosotros habíamos olvidado debido a la tecnología. Esta necesidad de experimentar con procesos más manuales gracias a la fotografía analógica, de ensayar a base de prueba y error y aportar una parte de nosotros a las creaciones de una forma más directa, no únicamente se tiene que entender como una acción, sino que se debería entender como una nueva filosofía dentro del arte.

¡Y esto es todo por hoy! Si queréis ver qué os traeré próximamente… ¡solo hay que estar atentos a la web! Y si no podéis esperar, siempre podéis leer alguno de los magníficos posts que os ofrecemos, para hacer más amena la espera. ¡Nos vemos en breves!

Anna García Serrano
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