Numen: la inspiración y las nuevas vías
Hace tiempo os hablábamos de Carlos Vermut y su Niña de Fuego, pero también de su primera obra, Diamond Flash, una película autoproducida y financiada por él, alejada completamente del monopolio de producción que lideran Mediaset y Atresmedia en el ámbito cinematográfico español. Todo un caso singular en un gran mosaico de películas que forman lo que es llamado el nuevo cine español, también denominado el otro cine español, un término usado para diferenciarlo de las corrientes más mainstream.
Un cine que en muchos casos es financiado por crowfunding, una vía que pone al alcance de todos lo que hace unos años parecería impensable para gente que cuenta con ilusiones y ganas, pero sobre todo con buenas ideas. Por eso os queremos hablar de Numen, un proyecto que ya lleva unas semanas en Verkami, una de las plataformas más conocidas de micromecenazgo. Se trata de un cortometraje que se centra en un tema que nos toca muy de cerca en esta página, la inspiración y el arte.
Marc, su protagonista, es un escritor consagrado que se encuentra perdido en busca de inspiración. Todo cambia cuando conoce a Bárbara, una chica joven, curiosa e inteligente. Pese a que al principio todo parece mejorar para él, la relación se complica hasta tal punto que los límites de lo real y lo imaginario se emborronan.
Numen no sólo cuenta con una buena premisa, sino también con un prometedor equipo de profesionales detrás de las cámaras, que demostraron con su anterior cortometraje Ana, ganador del premio del jurado en el festival ProAM de Estados Unidos, que tenían mucho que ofrecer.
Sin embargo, una de las características más importantes e interesantes del proyecto es su sonido, ya que será el primer cortometraje rodado en España grabado en Dolby Atmos, un sistema pionero en grabación de sonido que ha sido usado en películas como Gravity, La vida de Pi, Guardianes de la galaxia, o las recientes Los Vengadores: La era de Ultrón y Mad Max: Furia en la carretera. Por muy florido que pueda sonar, este sistema permite escuchar el sonido de la misma forma tanto en casa como en las grandes pantallas, porque se trata de una mezcla de sonido basada en objetos, es decir, no funciona por elección de altavoces, sino que se diseña a partir del espacio. El sonido de los objetos procede de lugares exactos que son diseñados en la postproducción del metraje, cosa que permite una mayor inmersión en la obra, ya que con esta tecnología podemos escuchar cómo un avión pasa por encima de nosotros, o cómo un pájaro salta de rama en rama, como bien explica Daniel Jiménez, su diseñador de sonido en el blog de Numen.
A pocos días de acabar su campaña en Verkami, el proyecto se mantiene firme y encara los últimos detalles de su preproducción para su rodaje en julio. Al igual que con otros proyectos que buscan financiación en plataformas como Verkami, nos fascina tanto el esfuerzo y las ganas de creación por parte de equipos como el de Numen como la participación de cada persona que aporta lo que puede a este tipo de proyectos, movidos por la ilusión y la convicción, creando así un impulso colectivo por nuestro cine.
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